Andrea Media y Stephany González, de 2º BTO A
Como en cada curso el mes de septiembre, conocido como uno de los más intensos en el mundo de la moda, ha dejado claro que las pasarelas no solo marcan tendencias estéticas, sino que también reflejan y reaccionan a los cambios sociales, económicos y culturales. Durante septiembre las cuatro capitales más importantes de la moda —Nueva York, París, Milán y Londres— se convierten en escenarios donde diseñadores y marcas exponen sus visiones para las próximas temporadas, incluyendo la primavera y verano de 2025.
A pesar de la percepción de que la moda es un universo aislado y elitista, lo cierto es que está profundamente influenciada por las dinámicas globales. Factores como los cambios económicos, las crisis ambientales, los problemas sociales y los gustos emergentes de las nuevas generaciones moldean las tendencias. La moda, lejos de ser un capricho de unos pocos, es un reflejo de nuestra realidad colectiva.
Este artículo no solo explorará las tendencias que dominarán las próximas temporadas, sino también cómo estas están intrínsecamente conectadas con los desafíos que enfrentamos como sociedad. La moda, más que un conjunto de prendas, es un espejo de nuestra cultura, nuestras luchas y nuestra evolución como humanidad.
El impacto de la economía en la moda
La economía ha tenido un efecto importante en el mundo de la moda, al fin y al cabo, la moda y casi todo en este mundo dependen del dinero. La posible segunda recesión económica, los cambios de presidentes en Estados Unidos y otros factores están marcando el rumbo. Esto quedó claro en la Paris Fashion Week, donde las calles estaban llenas de productos de marcas como Tranoï. Su director general confirmó que, después de este tipo de ventas en la ciudad, lograron aumentar sus ingresos un 3 % en comparación con septiembre de 2023.
Esto es algo sin precedentes, jamás se había presentado en la historia del mundo de la moda. Marcas como Tranoï, que antes solo conocían los muy aficionados a la moda o quienes pertenecen a la élite, ahora son visibles y accesibles para el público general. Que este tipo de marca esté abierta a todos demuestra en qué estado se encuentra la moda mientras cerramos el año.
La juventud y su impacto en la moda
Por otra parte, en la actualidad podemos notar esa necesidad de la juventud de hacer un impacto, como Greta Thunberg o los diversos movimientos como el Movimiento 4B en Corea del Sur, que promueve que las mujeres rechacen cuatro aspectos de la vida heterosexual. Esto no solo queda como un movimiento social y político, también llega a otras áreas de la vida, como la moda.
Los jóvenes están siendo escuchados y tuvieron gran presencia al menos en París Fashion Week. Incluso el ayuntamiento de París colaboró para que hubiera una mayor representación de estas ideas en la moda. Algo interesante que fue muy comentado es la versatilidad y la tendencia evidente de los jóvenes: pueden vestir de Shein y combinarlo con un bolso Chanel.
Este patrón también se pudo ver en otras semanas de la moda, como la de Nueva York, donde, en vez de realizarse un desfile de apertura como todos los años, se inició con una marcha de «Fashion For Our Future» desde Macy’s hasta Bryant Park, animando a la participación en ese sagrado derecho y rito democrático: votar.
Predicciones para las Tendencias de 2025

PATRONES METÁLICOS
Los patrones metálicos, mencionados por expertos a finales de 2023, se perfilan como algo que permanecerá al menos hasta finales de 2025. Este estilo, que resalta y va en contra de las tendencias más conservadoras, será especialmente popular entre los jóvenes. Las prendas y accesorios metálicos buscarán destacar y romper con lo convencional.


MINIMALISMO, CONERVADURISMO Y QUIET LUXURY
Una tendencia importante que continuará creciendo es el regreso hacia lo conservador, minimalista y tradicional. Esto ya era evidente desde el verano de 2024, cuando vimos un alejamiento de los maquillajes exagerados y los vestidos llamativos. Ahora, lo sencillo y discreto domina, con un concepto conocido como quiet luxury.
Esta tendencia no solo es estética, sino que está profundamente relacionada con los cambios políticos y sociales. Por ejemplo, el triunfo de Donald Trump en Estados Unidos es una muestra de cómo sectores conservadores están recuperando terreno. No es que Trump imponga tendencias, pero su victoria refleja un cambio cultural hacia la nostalgia por formas «correctas» de vivir, que también impacta en la moda.
La moda de lujo se transforma: ya no se trata de exhibir marcas ostentosas o gastar de manera evidente, sino de un lujo discreto que no necesita logotipos. Las clases altas no sienten la necesidad de demostrar su estatus porque ya lo tienen, y prefieren piezas simples pero de alta calidad. Por otro lado, las clases medias y bajas adoptan este estilo como una forma de aspirar a ese estilo de vida, copiando la elegancia sin estridencias.
Es interesante mencionar que esta mentalidad conservadora afecta otras áreas de la moda. Por ejemplo, ciertas tendencias más atrevidas que se esperaban en 2024, como el cabello gris, el maquillaje inspirado en los años 2016 y los estilos más audaces, no lograron despegar. La razón está en este regreso al conservadurismo, donde se prefiere una estética «limpia», también conocida como el clean girl aesthetic. Este estilo, que exalta la simplicidad, transmite esa sensación de vivir de manera “correcta” y “pulcra”, alejándose de lo llamativo o extravagante.


TWEE AESTHETIC Y LA NOSTALGIA
Otra tendencia que se ve claramente es el regreso del twee aesthetic, mezclado con estilos de los 2000 y 2010. Este estilo es una especie de combinación entre lo nerd, lo bohemio y lo chic, donde la inocencia y lo retro se convierten en elementos clave. Es como una reinterpretación de estilos pasados, combinando elementos boho y el estilo de modelos que vivían de fiesta. Aunque es difícil de explicar, se ve como una fusión de distintas estéticas nostálgicas.


TIRO BAJO Y MINIFALDAS
Las prendas de tiro bajo, como faldas, pantalones cortos y jeans, serán un punto fuerte en 2025. Esta tendencia, ya arrastrada desde 2023, es un claro guiño a la moda de los 2000. Además, veremos minifaldas con más detalles: aunque en 2024 fueron mayormente de jean, ahora aparecerán en diferentes colores, telas y cortes, pero manteniendo el tiro bajo. Estas tendencias serán especialmente populares entre las generaciones más jóvenes, quienes continúan explorando la moda cíclica de décadas pasadas.


DRAGONES Y MODA TRADICIONAL CHINA MODERNIZADA
La globalización sigue marcando tendencias, y en 2025 veremos un aumento de patrones inspirados en la cultura china, especialmente dragones. Vestidos, croptops y otras piezas adaptarán esta estética tradicional con un toque moderno y callejero, pero sin perder sus raíces. Este estilo combina lo futurista con lo tradicional, reflejando un interés creciente por reinterpretar piezas culturales para hacerlas más juveniles y accesibles.


CLASSIC WINGS Y EL MAQUILLAJE RETRO
En cuanto al maquillaje, el classic wing volverá con fuerza. Aunque este estilo nunca desapareció del todo, ahora tendrá un enfoque más limpio y estará inspirado en los años 60, especialmente hacia finales de año, cuando llegan las fiestas y las ocasiones nocturnas.

Estas tendencias no solo hablan de la moda como algo estético, sino como un reflejo de los cambios culturales, sociales y políticos que vivimos. Desde la globalización hasta la nostalgia por tiempos más simples, pasando por los movimientos sociales y el conservadurismo, cada elemento de la moda para 2025 nos cuenta algo sobre nuestra realidad actual.